“La Imagen Accesible”: un gesto artístico.
Facundo Díaz y Federico Aguilar Tejada son dos artistas mendocinos que en el año 2009 decidieron poner a la venta su producción artística a través de un medio que tenía como objetivo “hacerse unos pesitos”. Ellos llamaron a ese medio “La Imagen Accesible”: una muestra de tan sólo un día donde se podía comprar obras de arte originales a un precio accesible.
“La Imagen Accesible comenzó cuando vimos que teníamos mucha producción y ninguno tenía trabajo. Decidimos hacer una muestra con eso, para venderlo a precios muy bajos para la época. Era mejor tener algo que nada. Nos fue muy bien, entonces pensamos que podríamos hacerlo también con otros artistas. Y desde ahí casi en seis meses hicimos nueve ediciones, y se vendió mucha obra de unos treinta artistas. En los eventos tocaban diferentes bandas y solistas amigos. Fue una época de inmensa alegría, hicimos mucho prácticamente con nada, sólo con buenas ideas, y con gente que se copaba con ellas.”
La idea base, y simple, de hacer esa muestra de tan sólo un día, donde las obras se ofrecían a un precio accesible, fue la piedra fundamental de este proyecto. Pero las “Imágenes Accesibles” que siguieron a la primera edición, dejaron de ser simplemente una muestra para volverse un “gesto”.
Y aquella idea de pensar lo “accesible” sólo como “un precio bajo” se extendió hacia sentidos más amplios y profundos: se volvió un “medio de posibilidades” (culturales y simbólicas), y un “formato artístico” propio de ese gesto.
El gesto de lo accesible: posibilidades y formatos.
Parafraseando la definición del concepto de accesibilidad “La Imagen Accesible” implica, en la escena del arte contemporáneo mendocino, “promover ciertas facilidades que ayudan a salvar obstáculos o barreras de accesibilidad”. En ese sentido el “gesto” se vuelve una “ayuda técnica” para que todas las personas puedan acceder a la compra de una obra de arte original, para que los artistas puedan acceder a un cierto mercado, y para que el público pueda acceder al encuentro con los artistas y el sentido de sus obras.
El “gesto” se lleva a cabo donde los encuentros puedan producirse, y no en un espacio físico determinado. Porque si hay algo que queda claro, cuando observamos el trayecto que ha transitado este proyecto, es que para “La Imagen Accesible” el espacio es un lugar simbólico y significativo, generado por las propias personas, que se apropian del proyecto y sus objetivos.
Y uno de esos objetivos se fue configurando sobre la marcha. Facundo y Federico se encontraron con que “La Imagen Accesible” estaba propiciando la posibilidad de impulsar un mercado del arte local, y un coleccionismo joven:
“La Imagen Accesible es una burbuja en el mercado, pero es una burbuja posible porque posibilita comprar arte en Mendoza. Actúa como un intermediario entre el artista y su comprador potencial; presenta a los artistas y les dice a las personas que pueden tener una obra de arte contemporáneo en su casa. Produce un acercamiento que sucede gracias a la accesibilidad económica y accesibilidad por parte del artista. De esta manera “La Imagen Accesible” promueve y propicia el coleccionismo joven, sin pensar en “joven” como un asunto de edad, sino con la intención de proponer un coleccionismo “nuevo” y al alcance, como una posibilidad alternativa al mercado predominante. De allí que la propuesta se vuelva también formadora de un público que no está acostumbrado a la cercanía con el arte”.
Pensando en todo lo mencionado el artista que participa de “La Imagen Accesible” produce las obras que venderá pensando en este evento. Por eso es que decimos que lo “accesible” es también para ellos un concepto que se vuelve “formato”.
En el año 2010 fueron invitados por “Costado Galería” a participar en ArteBa. El stand de “Costado” fue desmontado por un día para mostrar el proyecto de “La Imagen Accesible”, que traía consigo la obra de 30 artistas. “30 actos de Fe” fue la frase que los identificó y que acompañó el gesto de esa 10° edición. Edición donde más que nunca los artistas pudieron pensar en lo “accesible” como formato más que como precio.
“Buscamos dar a conocer aquella obra que no está en el circuito del coleccionismo. En ese sentido la accesibilidad implica volverse accesible como artista, y no venderse barato.”
De un tiempo a esta parte…
La imagen en el transcurso de las primeras ediciones se volvió un espacio legitimador para el artista, sobre todo para el artista emergente. Incluso para algunos de ellos su primera exposición fue en una “Imagen Accesible”, nos cuentan los artistas Facundo y Federico.
Hoy varios de esos artistas emergentes que pasaron por “La Imagen Accesible” son artistas consagrados. Y aún siguen participando porque se sienten parte de este proyecto, que es un proyecto que ha demostrado que puede capitalizar sus posibilidades y limitaciones, volviéndolas conceptos y gestos propios. Eso, lo convierte en un “espacio” legítimo, y por tanto, legitimador.
Este proyecto que ya lleva 15 ediciones, sigue y, sin dudas, seguirá creciendo. Tiene programado su cierre en la edición número 51°, pero seguramente ese no será el fin del proyecto, sino de una etapa que dará paso a otra. Y dependerá de todos los implicados en la escena del arte local que la nueva etapa sea igual de necesaria y productiva, como lo es hoy “La Imagen Accesible”.
La Imagen Accesible XVI: próxima edición.
En esta nueva edición se podrá ver y/o adquirir la obra de casi treinta artistas de la misma generación, que se encuentran en constante producción desde hace algunos años. Albergará este evento el Espacio Cultural Julio Le Parc, que en el marco de su ciclo de arte contemporáneo denominado “Distancia Focal”, realiza su 7° edición con “La Imagen Accesible XVI”.
Es un grupo ecléctico, nos explican Facundo y Federico, en cuanto a técnica y poéticas. Están unidos por una visión contemporánea a la hora de resolver sus obras, y participan de “La imagen” porque, de alguna manera, se ven a sí mismos en ella, porque pueden sentir que son parte de esto que fue adquiriendo cada vez más peso, de sus objetivos (que se expanden más allá de la propia “Imagen”), y porque si bien estamos queriendo constituir una especie de mercado, no es del tipo que los haga sentir prisioneros del mismo.
“Muchos de los que estarán en esta edición ya expusieron y apoyaron la propuesta, algunos se recomendaron entre sí, y otros se fueron sumando sobre la marcha. Eso es lo interesante y enriquecedor, porque la dinámica de trabajo de este proyecto siempre ha sido diferente en cada edición: por ejemplo, quién exponía en una “Imagen Accesible” se le pedía que hiciera el registro de la siguiente con otro artista, o que colaborara en el montaje, etc.” Lo que demuestra el nivel de pertenencia y satisfacción que sienten quienes participan del proyecto.
INMENDOZA.com en su programa de apoyo al arte contemporáneo de Mendoza se suma también a esta propuesta; y te invita a acercarte al mundo del arte, como así también a que conozcas las obras a las que podrás “acceder” en esta nueva edición de “La Imagen Accesible”.