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Sergio Hocevar: el arte como un conjuro sofisticado

Una visita a la muestra La del estribo, de Sergio Hocevar, implica un paseo por buena parte de las artes mendocinas. Grabados inéditos del artista, su producción editorial y parte de la obra de su padre, Sergio Sergi, nos sumergen en las décadas brillantes de la cultura local.

La exposición que se puede ver en el Museo Carlos Alonso Mansión Stoppel, reúne los últimos grabados que Hocevar preparaba para exhibir y que quedaron en stand by cuando en abril de 2020 el artista dejó este mundo. De hecho podemos ver una de las obras inconclusas que se encontró en su tablero de dibujo y no es casual el nombre elegido para la muestra: La del estribo, expresión que hace referencia al hecho de subirse al caballo antes de partir.

Hijo de otro enorme grabadista, Sergio Sergi, Hocevar nació en Santa Fé en 1937, y llegó a radicarse en Mendoza después que su padre es contratado para dar clases en la UNCuyo. Allí Sergi fue maestro y profesor de Carlos Alonso, un vínculo que esta muestra rescata exhibiendo también en el tercer piso parte de los grabados de Sergi y un polémico retrato que le hace Carlos Alonso en 1963. La anécdota de lo que sucedió entre ambos artistas la cuenta el curador Pablo Chiavazza en un video junto a Pablo Hocevar (hijo de Sergio Hocevar) que puede verse como parte de la muestra y que invitamos a descubrir.

Pero vamos a lo que nos deja ver Sergio Hocevar en los primeros dos pisos de las modernas instalaciones del museo. La del estribo es una serie de grafitos inéditos que impactan por su versatilidad temática y los influjos de la literatura y el arte universal como podemos disfrutar, por ejemplo, en La lección de anatomía.

A lo largo de la muestra encontraremos surrealismo y humor negro, criaturas que pudieron escaparse del Jardín de las Delicias, sombreros que podrían eyectarse hacia un cuadro de Magritte, mujeres redondas a lo Botero y obras tan prosaicas -pero no por ello menos significativas- como La Siesta.

Hocevar decía que «a través del arte lo que queremos es descubrir la realidad, dominarla, inclusive cambiarla a nuestro gusto. Creo que el arte es, en el fondo, un conjuro sofisticado». Su obra, sin dudas lo es.

Absolutamente multifacético, Sergio Hocevar no se limitó jamás. Su búsqueda lo llevó a escribir, dibujar, pintar y a generar proyectos culturales como la Galería Sergio Sergi por donde pasaron además de su padre, artistas de la talla de Roberto Azzoni, José Bermúdez, Carlos Ercoli, Zdravko Ducmelic, Víctor Delhez, Luis Scafati, Eliana Molinelli, Antonio Sarelli, Ángel Gil y Alfredo Ceverino, entre otros.

Como editorialista, fundó  Estudio Hocevar, sello con el que logró publicar 17 libros entre los que se encuentran tanto el de la obra completa de su padre como las antologías del poeta Ramponi, recopilaciones de obras de Bermúdez y Azzoni, producción literaria propia, y portfolios de artistas, como el dedicado a la serie Cerditos rosados, de Luis Scafati en 1981, o los que en 1984 reprodujeron dibujos inéditos de Roberto Fontanarrosa y de Caloi.

 

La muestra incluye estas piezas gráficas además de fotografías y libros haciendo un valorable repaso por cada una de las formas que Hocevar encontró para manifestarse.

La del estribo, muestra de Sergio Hocevar. Museo Carlos Alonso Mansión Stoppel, Emilio Civit 348, Ciudad de Mendoza.
Días y Horarios: martes a domingos y feriados de 9 a 20h. Entrada: gratuita.

Fotos: Giuliano Gabrielli

 

 

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