Para venir a Mendoza o pasear por ella no necesitamos excusas porque saltan a la vista: la montaña, la ruta del vino, la gastronomía y los árboles que acompañan el andar.
En esta época del año, el sol no se queda hasta muy tarde y muchos deciden salir a tomarlo por cualquier rincón la provincia. Semana Santa está a la vuelta de la esquina y para disfrutar de los días libres, desde Inmendoza recomendamos varios recorridos para hacer.
Potrerillos y Valle de Uco, unidos por una ruta
Los clásicos asados en Potrerillos pueden convertirse en un divertido paseo hacia Tupungato, si es que tomás la ruta hacia el Valle de La Carrera. El camino regala postales y panorámicas, además de unir los pueblitos de San José y Las Vegas.
Desde el espejo de agua y después de cruzar el puente sobre el río Blanco, hay que tomar a la izquierda la RP 89, llegar a la villa veraniega y tomar hacia el sur.
Para los que vayan, podrán disfrutar del programa de Música Clásica por los Caminos del Vino; el concierto de esta edición se desarrollará el viernes 19, a las 11.30, en el Monumento a Cristo Rey (Los Cerrillos). Entre otros varios que se pueden consultar en la programación.
Además, el Desierto de las Huayquerías, en San Carlos, también se ofrece como un escenario ideal para conocer y, a la vez, disfrutar de un show musical. Éste constituye uno de los paisajes más enigmáticos y desconocidos del departamento, ubicado sólo a 7 kilómetros de la plaza principal.
El desierto está formado por escalonados paredones de tierras arcillosas que conforman una suerte de laberinto; éste lleva a un impactante vertedero, donde las tormentas estivales desaguan y continúan tallando ese desierto de mítica mágica.
La experiencia se hace a pie por el Cañadón de la Salada y lleva una hora aproximadamente. Es allí justamente, donde el sábado 20, a las 18.30, se realizará el recital de flauta traversa en el marco de la edición XX del ciclo musical.
Norte: De los Caracoles de Villavicencio a las Minas de Paramillos
Los Caracoles de Villavicencio conforman el sendero que lleva hasta la Cruz de Paramillos; antes era usado para cruzar a Chile y hoy es un hermoso trayecto que permite el avistaje de la flora y fauna de la zona. Además de ofrecer una vista espectacular de la Cordillera desde su mirador natural El Balcón de la Quebrada del Toro.
Al llegar al punto más alto del pintoresco «camino de las 365 curvas» uno encuentra la pequeña capilla de piedra, cuya cruz en alto cruz dio nombre al lugar, y al seguir el camino se empieza a descender hacia el valle de Uspallata.
En ese trayecto están las antiguas construcciones mineras que levantaron los jesuitas, las más antiguas del país, de donde se extraía plomo, plata y zinc. Hoy se podría decir que es un verdadero Parque de Aventura ya que en su interior hay dos circuitos de actividades: trekking y rappel.
Y si te animás a andar unos kilómetros más, hacia el norte, llegás a la provincia de San Juan para disfrutar del Parque Nacional del Leoncito en el departamento de Calingasta.
Sur
Si la decisión es invertir horas de descanso y combinarlas con turismo aventura y paisajes únicos, los departamentos de San Rafael y Malargüe son los ideales.
El circuito sanrafaelino -encabezado por la ciudad homónima- es constituído por el Cañón del Atuel y otros embalses y lagos como Agua del Toro, Los Reyunos, El Nihuil y Valle Grande.
La virtud de este sitio es que a pocos kilómetros del centro, hay una amplia oferta de actividades recreativas como trekking, cabalgatas, safaris fotográficos, mountain bike, enduro, motonáutica, velerismo, canotaje, buceo, windsurf, esquí acuático, kayak, rafting, pesca de salmónidos y de pejerrey.
Además se pueden visitar bodegas tradicionales y en la isla del Río Diamante, el Museo de Historia Natural.
En Malargüe, a 420 kilómetros al sur de Mendoza, se puede visitar y disfrutar la Laguna de la Niña Encantada, el Pozo de las Ánimas, los Castillos de Pincheira, la Caverna de las Brujas, las reservas faunísticas de la Payunia y de Llancanelo y el Valle Hermoso o el Valle Noble.
Mountain bike y/o cabalgatas, tomar baños termales a cielo abierto en el Cajón Grande o Baños del Azufre, y/o reposar en las fuentes termales de Los Molles, son algunas de las opciones que se ofrecen.