El próximo jueves 10 de julio, a las 17:36 (hora argentina), la Luna del Ciervo alcanzará su punto máximo en el grado 18 del signo de Capricornio. Este plenilunio de julio, conocido así por las culturas nativas de Norteamérica, coincide con el momento del año en que los ciervos machos renuevan sus astas: una metáfora perfecta para lo que esta Luna propone energéticamente.
Así como estos animales se desprenden de su vieja cornamenta para dar paso a una nueva, más fuerte y afilada, esta Luna nos invita a dejar atrás lo que ya no tiene sentido para poder abrazar la transformación. Es un portal energético de renacimiento, marcado por la energía perseverante de Capricornio.

Capricornio, representado por la cabra de montaña, nos recuerda que el camino hacia la cima está lleno de desafíos. Pero también nos enseña que con esfuerzo, trabajo constante y conciencia de la realidad, todo objetivo es alcanzable. En tiempos donde muchos buscan atajos, esta Luna viene a recordarnos que lo que vale la pena requiere tiempo y constancia.
Una de las claves de este plenilunio es su armonía con Marte en Virgo y su interacción con Júpiter en Cáncer. Esa combinación trae una energía altamente productiva, especialmente enfocada en los proyectos laborales, metas profesionales y objetivos a mediano y largo plazo. Júpiter actúa como amplificador de oportunidades, y Marte suma impulso, disciplina y estrategia. Si venías soñando con concretar algo, esta es la señal que estabas esperando para poner manos a la obra.
¿Cómo impacta esta Luna en cada elemento del zodíaco?
Fuego (Aries, Leo, Sagitario)
La energía de Júpiter (regente de Sagitario) les da un empujón extra. Es un momento ideal para tomar decisiones valientes, especialmente en lo laboral. Quienes se animen a asumir riesgos podrán ver los frutos hacia fin de año. La consigna: acción con propósito.
Tierra (Tauro, Virgo, Capricornio)
Tiempo de sentarse a planificar. La segunda mitad del año traerá movimientos importantes en lo económico, por lo que armar una estrategia clara será la mejor forma de prepararse para aprovechar oportunidades y evitar sorpresas.
Aire (Géminis, Libra, Acuario)
Esta Luna pone el foco en los vínculos. Es probable que ciertos lazos lleguen a su fin si ya no están alineados con nuestra versión más actualizada. La energía invita a cerrar ciclos y hacer espacio para nuevas conexiones más genuinas.
Agua (Cáncer, Escorpio, Piscis)
Se vienen cambios sorpresivos, pero también mucha claridad emocional. Será clave priorizar el bienestar interno, sin juzgar lo que sentimos. Si logran escuchar sus emociones con compasión, este periodo puede ser profundamente sanador.





