El lunes 7 de abril, la Guía Michelin volvió a publicar su selección en Argentina y reafirmó que Mendoza tiene un lugar asegurado en la conversación global sobre cocina. No solo se conservaron las distinciones del año pasado: también se sumaron nuevas estrellas, tanto rojas como verdes, y más restaurantes entraron en la lista de recomendados.
La ceremonia fue al aire libre, en los jardines de Susana Balbo Wines, en Agrelo. La entrega de premios fue en un espacio cerrado y, entre copas, luces y una noche mendocina, se cruzaron cocineros, bodegueros, autoridades, prensa y gente del sector. Hubo abrazos, saludos, algunas lágrimas y muchos brindis.
3 nuevas estrellas aterrizaron en Mendoza

Uno de los momentos fuertes: Angélica Cocina Maestra se llevó su primera estrella roja y, además, una estrella verde. Sus chefs ejecutivos, Josefina Diana y Juan Manuel Freijoo, pareja en la vida y en la cocina, subieron al escenario conmovidos. “No lo podemos creer. Hoy nos levantamos y dijimos: ya está. Somos lo que somos, hacemos lo que hacemos. Ya veremos qué pasa. Y nada, acá estamos. Capaz que mañana lo entendemos. Por ahora, no lo podemos creer. Estamos muy contentos”, dijeron. Después hablaron de ideas que venían dando vueltas y que ahora toman más forma. Entre ellas, un especiero propio hecho con productos de estación de su huerta: semillas de hinojo, de coriandro, hojas, flores, todo preservado a mano. “Jose hasta se las llevaba a casa. Nos tomábamos unos mates y mientras charlamos, ella separa semilla por semilla. Todo muy lindo. Es como un recorrido de estaciones mendocinas”, contaron.
Osadía de Crear, restaurante de la bodega anfitriona, recibió su primera estrella verde. Flavia Amad explicó que esta distinción reconoce el trabajo en sostenibilidad, pero que lo social es clave. “Sobre todo el social: la posición de la mujer en la gastronomía, además del rol del proveedor, la huella de carbono, el impacto que tenemos sobre el mundo, sobre la humanidad y sobre lo que vamos a dejarle el día de mañana a Mendoza.” Y agregó: “Pero también importa el hoy. Eso: la mujer, su lugar, esa igualdad… y que esté.”

Riccitelli Bistró, en la bodega de Matías Riccitelli, sumó a su estrella verde una estrella roja. Juan Ventureyra, su chef, recordó sus inicios, nombró a Gaby Oggero, a su familia, a Matías y Vero Riccitelli y al equipo completo. “Estoy súper contento. Pensando en todo el equipo, en mis socios —Matías y Vero Riccitelli— y en Norberto, que trabaja todos los días cuidando la finca, con frío, con calor. No es un equipo, es una banda”, dijo. También se permitió desear algo simple: “Esperemos que haya laburo, es un año duro. Eso, que haya laburo para todos.”
Augusto García, cocinero de Zonda Cocina de Paisaje, renovó su estrella verde y definió el año que pasó como “muy divertido y caótico”. Y notó un cambio de público. “Ahora hay mucha expectativa, una clientela que realmente busca una gastronomía de alto nivel, y tenemos que estar a la altura.”
Una ceremonia con prestigio internacional
Durante la ceremonia, Elizabeth Boucher Anselin, directora de Relaciones Exteriores de la Guía Michelin, dijo que los inspectores “tuvieron un tremendo placer en armar esta selección”. Contó que descubrieron “muchas joyas nuevas” y que vieron cómo suben los estándares y crecen las prácticas sostenibles. “Nuestros inspectores han continuado su progresiva pero constante exploración en Buenos Aires y Mendoza.”
Eliana Banchik, presidenta de Michelin Argentina, destacó la cocina de Mendoza y la intención de reconocer “el talento y la pasión de todos los chefs y restaurantes que la integran”. Y recordó que Michelin tiene más de 110 años de historia. “Estos dos destinos reflejan lo mejor de la gastronomía y la hospitalidad de nuestro país.”
La comida de la noche estuvo a cargo del Grupo Gula. Hubo fuegos, estación de picada, ceviches y platos con productos locales: conejo, pejerrey, berenjenas baby, burrata, caviar de apio. El menú cerró con una consigna clara: mostrar lo de acá, lo de estación, lo propio.
El vino lo curó Wines of Argentina, con Romina Rolón como head sommelier del evento. Se sirvieron las siguientes etiquetas como As Bravas Malbec 2017 , El Enemigo Chenin 2023 de El Enemigo, Susana Balbo Signature Torrontes 2022, y un Naranjo de Torrontes 2020 , Malbec Argentino 2005 y White Bones 2021 de Catena Zapata; Proyecto Hermanas White Blend 2023 y Primeras Viñas Malbec de Lagarde 2020, y Petit manseng 2020 y Terrazas de los Andes Grand Malbec 2022..
El conductor fue Iván de Pineda. Llamó uno por uno a los cocineros, presentó menciones especiales y acompañó cada momento con comentarios cortos. En el salón se escucharon muchas veces las mismas palabras: gracias, equipo, trabajo, futuro.
Mendoza, edición 2025
Estrellas rojas
- Casa Vigil
- Brindillas
- Azafrán
- Zonda Cocina de Paisaje
- Angélica Cocina Maestra (nuevo)
- Riccitelli Bistró (nuevo)
Estrellas verdes
- Casa Vigil
- Riccitelli Bistró
- Zonda Cocina de Paisaje
- Osadía de Crear (nuevo)
- Angélica Cocina Maestra (nuevo)
Recomendados
- La Vida
- Los Bocheros
- Martino Wines
- Osadía de Crear
- Quimera Bistró
- Renacer
- Ruca Malen
- Soberana
- 1884 Francis Mallmann
- 5 Suelos Cocina de Finca
- Abrasado
- Anna Bistró
- Assemblage
- Centauro
- Espacio Trapiche
- Fogón Cocina de Viñedo
- La Vid (Bodega Norton)
Guía Michelin en Argentina: cómo funciona y por qué está acá
La Guía Michelin está disponible en Argentina desde 2023. Este año se lanzó su segunda edición, otra vez en formato digital y gratuito. El acuerdo entre el país y la empresa francesa es por tres años, con posibilidad de renovarse.
La guía nació en Francia en 1900. La publicaron los fundadores de la marca de neumáticos Michelin con la idea de acompañar a quienes viajaban en auto. Incluía datos útiles para el camino: mapas, estaciones de servicio, cómo cambiar una rueda y también dónde comer y dormir.
Con el tiempo, la parte gastronómica fue tomando más peso. En 1923 empezaron a recomendar restaurantes fuera de los hoteles y en 1926 sumaron las estrellas como sistema de reconocimiento. Desde entonces, la guía se fue expandiendo por distintas regiones: Europa, Estados Unidos, Asia y, más tarde, algunas ciudades de América Latina.
Michelin no trabaja con rankings ni votaciones abiertas. Las evaluaciones las hacen inspectores anónimos, que visitan los restaurantes como cualquier cliente, pagan la cuenta y luego entregan un informe. Lo que se analiza es la cocina: qué productos se usan, cómo están ejecutados los platos, qué sabores se proponen, si hay una mirada propia del chef y si eso se sostiene en el tiempo y en todo el menú.
Según ese análisis, un restaurante puede recibir una, dos o tres estrellas. También hay otras distinciones, como el Bib Gourmand, que destaca propuestas con buena relación entre precio y calidad.
Argentina es uno de los pocos países de la región que forman parte de esta selección global. La guía está disponible en el sitio oficial de Michelin.