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Alberto Casteluchi Ponce: de La Consulta al Louvre

El ilustrador mendocino expondrá próximamente en el museo parisino. Pudimos hablar con él y conocer los detalles. Descubrilo en la nota. 

El mundo del arte y la agricultura convergen de manera excepcional en la historia de Alberto Casteluchi Ponce, un ingeniero agrónomo mendocino, de La Consulta, que ha llevado su pasión por la ilustración hiperrealista a niveles extraordinarios. 

Originario de una familia enraizada en el mundo agrícola, Alberto encontró en la agronomía su profesión, pero también un vínculo con su lado artístico.

Desde temprana edad, demostró un interés innato por el dibujo, aunque no fue sino hasta la llegada de las redes sociales, especialmente Facebook, que comenzó a compartir sus creaciones con el mundo. Sus obras empezaron a ganar admiradores gracias a su sorprendente realismo y meticuloso detalle. Aunque inicialmente dudaba en mostrar su arte públicamente, las reacciones positivas lo alentaron a perfeccionar su técnica de manera autodidacta.

Después de completar sus estudios de Ingeniería Agrónoma y trabajar en el ámbito de la ganadería en Córdoba, Alberto decidió explorar su pasión artística más a fondo. Sus dibujos, todos realizados con grafito, le abrieron puertas a oportunidades insospechadas.

Con las redes empecé a mejorar cada vez más, empezaron a llegar las primeras invitaciones a bodegas en Valle de Uco, me pedían que llevara algún cuadro a los restaurantes, me proponían hacer etiquetas de vino, otros me proponían alguna galería un poquito más grande… y en Córdoba me empezaron a invitar a galerías y ahí hice mi primera exposición. Las puertas se empezaron a abrir cada vez más, conocí a algunos músicos y les hice retratos, como Juan Fuentes de Los Huayra o el actor Diego Olivera, que me pidió un retrato para su esposa, la actriz Mónica Ayos”, cuenta el artista.

Alberto Casteluchi Ponce y su vida profesional

A medida que su enfoque se volvió más profesional, Alberto participó en su primera exposición en Córdoba y, gradualmente, se sumergió en el mundo del arte.

Una gran oportunidad llegó en el año 2019, cuando se encontraba trabajando en una bodega de California, Estados Unidos. “Recibí una invitación para exponer en la galería del dibujante Nick Cann y después en las galerías de la famosa Bodega Chappellet”, cuenta Alberto. Tan bueno fue el recibimiento por parte de la familia Chappellet, y tan encantados quedaron con el trabajo de Alberto, que utilizaron en una etiqueta una ilustración realizada por él, la cual retrata a Molly Chappellet, socia fundadora del lugar. 

La V Bienal Internacional de Arte Contemporáneo de Argentina, en el Centro Cultural Borges de Buenos Aires en 2022, marcó un punto culminante en su carrera, demostrando su capacidad de trascender los límites de lo autodidacta y consolidarse en el panorama artístico.

Lo más sorprendente llegó cuando Alberto recibió la noticia de que su obra sería exhibida en el icónico Museo del Louvre en París, un honor que pocos artistas alcanzan en su vida. Cuatro de sus obras serán presentadas durante una semana, del 19 al 25 de octubre, en una exposición internacional de gran importancia en el Salón Art Shopping. El evento reúne a aproximadamente 400 artistas de todas partes del mundo, previamente seleccionados por un jurado.

“María Elena Beneito, directora de la Bienal, me postuló. Ella propuso mis dibujos al jurado. Yo no estaba al tanto de nada y cuando me enteré que había quedado seleccionado fue una sorpresa absoluta”.

Alberto Casteluchi Ponce en exposición

Como si eso fuera poco, días después recibió una propuesta para exponer en Roma, más precisamente en un Seminario Teológico Internacional del Instituto Missioni Consolata en Roma. “Es una galería mucho más chiquita y una invitación más informal de parte de las personas a cargo de la galería de un seminario en Roma. Me preguntaron si podía participar de una charla y contar sobre mi dibujo y mi técnica y, además, exponer obra”.

Alberto Casteluchi Ponce, un hombre que encuentra su inspiración en la naturaleza, en los animales y en el desafío de capturar la realidad con cada trazo, ha logrado un viaje artístico impresionante. Su perseverancia y dedicación autodidacta son ejemplares, y su historia nos recuerda que las pasiones pueden florecer y dar frutos inesperados cuando se les permite crecer.

Ahora qué estás próximo a viajar ¿Cómo te sentís?

No sé, es una mezcla de ansiedad y felicidad. A veces pienso ‘¿en qué lío me metí?’ (risas).

Con su participación en exposiciones internacionales y su aspiración de explorar nuevas técnicas y formatos, como la incursión en la pintura con óleo y la producción de sus propias fotografías para luego llevarlas a sus dibujos, Alberto Casteluchi Ponce sigue desafiando los límites de su creatividad. Desde las tierras de Mendoza hasta las galerías del mundo, su trayectoria ejemplar demuestra que el arte y la pasión pueden unir los mundos más inverosímiles.

Para conocer más sobre la obra de Alberto Casteluchi Ponce podés hacerlo ingresando a su cuenta de Instagram

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