La crema helada a base de yogur descremado es la nueva tendencia para los que buscan alimentarse sanamente. Pero ahora no solamente podés comprar yougurt para consumirlo en tu casa, desde hacen un tiempo abren sus puertas las «yogurterías» a modo de cafeterías para responder a la nueva demanda de un público que crece. Mendoza Smile Yog, frente a la plaza Independencia, se especializa en yogurt congelado, que se sirve con una amplia variedad de sabores que se puede combinar con frutas frescas, cereales, galletitas, chocolates y diferentes salsas.
Con frío o calor, esta variante se parece al helado, pero se come sin tanta culpa porque, en principio, no engorda. Con la mitad de calorías que un helado, es la opción para cualquier estación del año y sin grasas. La opción smoothie es como el licuado, pero un toque diferente: se trata de un batido a base de frutas y yogurt helado.
Smile Yog, la marca que creó Mariana Bauzá (primera propietaria de la yogurtería), nació casi al mismo tiempo que Danone pensó en el Frozen Yogurt, apostando a que los argentinos tenemos uno de los consumos per capita de yogurt, más altos de Latinoamérica. La idea es que se consuma yogurt no solo como un postre, sino como un snack.
Ambientada con tonos claros y mobiliario moderno por la interiorista Laura Lacroix, Smile Yog tiene aires de pulcra heladería. En sus mesas, la gente comparte tanto un desayuno o media tarde con tortas y facturas, como una buena combinación de yogurt helado, fabricado al instante en la máquina de frozen yogurt.