El vino elegido para degustar esta semana fue Kaiken Ultra 2011, Cabernet Sauvignon, realizado con uvas de Agrelo y Perdriel (Luján) y Lunlunta, Maipú. Para la degustación contamos con la visita de Micaela, una futura sommelier en formación, tres estudiantes de periodismo (Eymi, María Emilia y León) y una joven belga estudiante de enoturismo. Todos alrededor de la mesa, llenamos la cava de opiniones, anécdotas y por supuesto, vino.
Lo destacado de este vino Cabernet Sauvignon de Kaiken es que posee un 10 por ciento de Malbec que le aporta la presencia frutal. Además, el paso por barricas de roble francés también deja su toque. A la vista es un vino rojo violáceo con matices que se acercan al negro, de intenso brillo.
El análisis olfativo, sin embargo, despertó una variedad de opiniones entre los catadores: las especias y el pimiento, característicos de los Cabernet Sauvignon, se perciben de inmediato, así como las notas minerales en nariz, que lo vuelven un vino complejo y elegante.
La percepción en boca estuvo dividida: para algunos fue astringente al principio, y para otros suave. En boca fue astringente al principio para algunos y suave para otros. Eymi lo encontró «al principio astringente, pero después se volvió amable», en cambio León dijo que era «un poco ácido, astringente, relativamente amigable, de cuerpo ligero y final largo».
Para mí en boca se percibía muy buena acidez, y la diversidad de las opiniones de los catadores demostró que se trata de un vino complejo, típico de un Cabernet potente.
Micaela, futura sommelier, se animó a recomendar un maridaja para este Kaiken: pastas con salsa roja.
