El asado para nosotros es mucho más que una comida: es un ritual compartido, una excusa para estar juntos. Es un momento de anécdotas, risas y sobremesa. Ya sea para diez personas o apenas tres, lo importante es disfrutar de la alegría de compartir.
Bajo este espíritu, encontramos tres parrillas mendocinas que honran esta tradición como si estuvieras en casa. Conocelas:
1. Estancia La Florencia: tradición y abundancia en cada plato
Dicen que no hay nada más mendocino que comer en Estancia La Florencia, y después de nuestra experiencia, no podemos estar más de acuerdo. Desde que llegamos, Hugo, el mozo estrella con más de 15 años en el local, sacó a relucir toda la experiencia que lleva en sus espaldas y el servicio fue de 10.
Con 27 años de historia, este bodegón tiene una parrilla a la vista que te atrapa desde afuera. Si bien probamos de todo, incluida la parrilla para dos, destacamos la entraña, las achuras y el icónico panqueque de dulce de leche: una delicia indescriptible que tenés que ir a probar. Los platos son abundantes, ideales para compartir, y el ambiente combina lo casero con la elegancia de su imponente cava.
No es casualidad que sea un punto de encuentro para mendocinos y turistas. Si buscás calidad y tradición, La Florencia no falla. Visitalos de lunes a lunes de 12 a 00 hs. en Sarmiento 698 de Ciudad.
2. Don Belgrano: el nuevo favorito de la Ciudad
Abierto hace menos de tres meses, Don Belgrano ya se ganó un lugar en el corazón (y el estómago) de los amantes del asado. Todo allí coincidía con un típico domingo en casa: los aromas, los utensilios, la música.
Además de sus carnes, destacan los pasteles fritos de carne como entrada, sus ensaladas generosas y una amplia variedad de acompañamientos. Para el final, probamos la gran copa de helado con champán al estilo Don Belgrano.
El ambiente es familiar, los precios accesibles, y la atención es de esas que te hacen sentir como en un almuerzo en familia. Si buscás algo nuevo pero auténtico, Don Belgrano es el lugar. Está ubicado en Av. Perú 1197 de Ciudad y abren de martes a domingo de 10 a 00h.
3. Patio Jesús María: un clásico que nunca falla
El Patio Jesús María es ese lugar que siempre querés volver a visitar. Fuimos un domingo al mediodía y el lugar estaba repleto, con Omar, su dueño, paseando de mesa en mesa para asegurarse de que todo estuviera perfecto.
Comenzamos con pastelitos fritos de carne, seguimos con achuras, costillas y cuadril, maridados con un Tomero Malbec, y cerramos con frutillas con crema y panqueques de dulce de leche. Todo impecable, como siempre.
Con más de 10 años en Mendoza y una tradición que empezó en Jesús María, Córdoba, este lugar es sinónimo de alta gastronomía argentina. Si buscás calidad, calidez y sabores que te transporten, el Patio Jesús María nunca defrauda.
Encontralos en Boulogne Sur Mer 788 de Ciudad, de 12 a 15.30h y de 20 a 00.30h.
Si querés vivir el asado como lo hacemos los argentinos –con personas queridas, risas y anécdotas largas–, estas tres parrillas mendocinas son el lugar perfecto. Porque al final, el asado es mucho más que carne: es el sabor de estar juntos.