Jalapeño, ubicado en Vistalba, es un restaurante que brinda a sus comensales calidad y auténtico sabor a mar. Los platos son sencillos y frescos, cada uno de ellos tiene una «gran base de cocina chilena pero reversionada y adaptada al paladar mendocino» cuenta Agustina Bianchi la dueña del lugar.
Llegar por primera vez no es fácil. Escondido entre otras casas, Jalapeño no tiene cartel, pero si preguntan en la entrada del barrio al guardia, todos saben dónde está. Agustina nos recibe con una sonrisa y nos ubica en la mesa. En ella cuatro cubiertos, cuchara, tenedor y dos cuchillos para comer pescado o mariscos. La carta es extensa, apenas la abrimos en su primera página se lee «recetas de mar, bienvenidos a bordo». Trucha salmonada, salmón rosado, abadejo, merluza negra, lenguado margarita, atún rojo, son algunos de los pescados que se pueden elegir.
Los mariscos merecen una mención aparte. Pero los que más llaman la atención son las langostas traídas de Cuba, centollas de Tierra del Fuego, locos de Japón o de Chile, dependiendo de la época. «Tratamos de elegir los productos con mucho cuidado y respetando el entorno. Por ejemplo los locos son de cultivo, esto quiere decir que los crían de manera sustentable. Es una manera de colaborar con el ciclo productivo y evitar la explotación laboral. No son los mariscos tradicionales, tienen otro sabor, otra textura y hasta otro tamaño».
De entrada empanadas – pastelito criollo chileno pero sin cilantro, sin picante -; de plato principal; pastel de jaiva y salmón margarita, degustación de almíbares con nueces y pimienta negra; ese fue nuestro menú de viernes a la noche. Pero sin dudarlo volveríamos por muchos otros platos. Los productos de mar son los protagonistas de la carta, pero para quien no quiera comer este tipo de comidas, también ofrecen pastas y opciones como pastel de choclo y lomo de cerdo.
El ambiente es relajado, acogedor y familiar – aunque no poseen sillas para bebés ya que abren solo de noche -. Agustina si bien es sommelier, también es la cocinera del lugar. «Crecí en una cocina, mis papas abrieron este restaurante hace veinte años. En una época vivimos en Chile, mi mamá era cocinera e hizo un curso con Coco Pacheco, un referente de la cocina chilena. Cuando volvimos decidieron abrir en su casa una marisquería, así nació Jalapeño.»
Así que no hace falta viajar al país vecino o a alguna playa para comer un buen marisco o una buena pesca del día, a solo pocos minutos de la ciudad Jalapeño le hace un homenaje al paladar.
[alert type=green ]Jalapeño marisquería, se encuentra en Loteo El Casco, Guardia Vieja 1815. Vistalba. Reservas: 261 498-3440[/alert].