Dentro de la extensa paleta de colores que pinta nuestras vidas, emerge Peach Fuzz 13-1023 como un matiz melocotón sutilmente sensual. Este tono cálido, cuidadosamente equilibrado entre el rosa y el naranja, no es solo un color; es una experiencia. Evocando sinceridad y ternura, transmite un mensaje de cariño, comunidad y colaboración.
Estamos hablando del Color Pantone del Año número 25º, una iniciativa que Pantone Color Institute puso en marcha en 1999 con el objetivo, según apunta la empresa, de «involucrar a las comunidades de diseño globales y a los entusiastas del color, generando conversaciones sobre el significado cultural del color».
Este color dulce y ligero no solo despierta una nueva modernidad, sino que también refleja el pasado reimaginado para ambientes contemporáneos. Su luminosidad suave, efectiva y sutil, llena de belleza cualquier espacio u objeto, aportando una sensación poética y romántica con un toque vintage.
Color refugio en tiempos de inestabilidad
El 2023 fue un año muy agitado a nivel mundial. Así, Pantone, con la intención de promover la calma, la empatía y la importancia de cuidar lo que tenemos, elige al Peach Fuzz 13-1023 como color imperante del 2024. El mensaje es claro: a medida que reflexionamos sobre lo que realmente importa, recalibramos nuestras prioridades hacia la salud, el bienestar mental y físico, apreciando los momentos de calma y conexión.
Moda, diseño y decoración
Este nuevo color se hace presente en las pasarelas, el maquillaje, la tecnología y la decoración de interiores. En referencia a la moda, importantes casas como Balmain, Alaïa, Roksanda, Missoni y Kiko Kostadinov adoptaron al Peach Fuzz en sus colecciones mixtas para las presentaciones de primeravera/verano 2024.
Asimismo, el color ya invade los espacios privados, colándose en la decoración de las casas, sobre todo en dormitorios y baños.
¿Por qué el Peach Fuzz?
La elección de Peach Fuzz como el color del año no es simplemente estética, se fundamenta en un análisis global de las influencias cromáticas, desde el entretenimiento hasta la tecnología y las condiciones socioeconómicas. Este matiz trasciende regiones y sectores, reflejando un estado de ánimo y una actitud global. Se trata de lo que está ocurriendo en el mundo a nivel macro.
Al mismo tiempo, representa una tendencia, un estilo de vida. Es decir, busca influir en la percepción de la gente y expresar identidades personales, recordándonos el poder que tiene el color como un lenguaje no verbal. El objetivo de Pantone es que empresas y consumidores comprendan este poder y lo utilicen estratégicamente en la comunicación y el diseño.
En resumen, Peach Fuzz no es solo un matiz melocotón; es un recordatorio cálido de la importancia de la comunidad, la empatía y el autocuidado. Es un tono que nos impulsa a caminar hacia el futuro con calidez y serenidad, un mensaje encerrado en un color unificador y lleno de significado, que trasciende fronteras y culturas.