Mendoza es el destino perfecto para quienes buscan experiencias culinarias memorables. Comer entre viñedos, con arboledas que se pierden entre las vistas a la cordillera, convierte cada comida en un recuerdo inolvidable. En ese escenario, La Finquita 1920 abre las puertas de su restó y te invita a desconectar de la rutina y a conectar con sabores auténticos en un entorno de viñedos centenarios.
La Finquita Restó x Block es una experiencia única que combina alta cocina, tradición y los mejores vinos de Mendoza. Este restaurante boutique invita a disfrutar de un plan diseñado a tu medida: carta abierta, menú de 5 pasos y picnic, resaltando lo mejor de la gastronomía local y la excelencia enológica.
Una carta colmada de sabores y texturas
La propuesta de almuerzos del restó de La Finquita te propone un menú a tu elección con una carta abierta con platos para todos los gustos. Hay desde entradas ligeras y platos principales variados hasta postres que son verdaderas obras de arte.
Así, un comensal podría pedir Halloumi crocante con reducción de aceto crema de berenjena y gremolata de zucchini; como principal, un matambrito de cerdo marinado en vino o conchiglioni relleno de ricota cítrica y nuez, con caldo de hongo y kale frito, y como postre, un lingote de dulce de leche o aros de frutillas frescas con merengue.
Con cada plato, los comensales pueden elegir entre vinos seleccionados de la bodega propia, maridando cada bocado con lo mejor de la producción local.
El restó abre sus puertas de miércoles a domingo, de 13 a 17 hs; podés reservar en https://wa.link/5a14bq.
Menú de pasos: cinco momentos para degustar y disfrutar
Para los comensales que buscan una experiencia más estructurada, el menú de pasos es una excelente opción ya que fue diseñado para sorprender en cada bocado.
El menú inicia con un dúo de empanadas tradicionales, panes artesanales y vegetales frescos, ideales para acompañar con Bonarda o Chardonnay. Le sigue un Gravlax de trucha o burratina, maridados con Pinot Noir joven y como principal, se puede escoger entre un ojo de bife, canelones vintage o chivo mendocino, todos ideales para degustar con Malbec o Cabernet Sauvignon de producción propia.
Y para cerrar la experiencia, el postre que se sirve en dos tiempos, primero una granita de tres cítricos y luego un domo de chocolate o aros de frutillas frescas, acompañados de Semillón o Chardonnay. El café y las delicatessen son el broche de oro de este menú.
Picnic entre viñedos
Para quienes prefieren una alternativa relajada para el momento del almuerzo, La Finquita Restó x Block diseñó un picnic para dos personas; un plan ideal para disfrutar al aire libre, rodeado del paisaje único de los viñedos centenarios.
Incluye una botella de vino y aguas, tabla de quesos y charcutería, panes frescos, alfajor de maicena y húmedo de chocolate para el cierre dulce de la ocasión.
Un clásico mendocino: los Atardeceres del Vino
La Finquita 1920 no es solo un lugar para disfrutar de un almuerzo, es también una invitación a vivir la esencia de Mendoza a través de cada detalle y vivencia. Por eso, los sábados, la experiencia se extiende con los Atardeceres del Vino, la degustación de vinos acompañada de platitos, música en vivo y fiesta en La Finquita, convertida en un clásico de Mendoza. Conseguí tu tickets.
Ahora ya estás listo para ir a vivir esta experiencia gastronómica de La Finquita 1920 (Cruz Videla 450, Maipú).
