Su acercamiento al mundo del arte, el que despierta esa pasión, fue, nada más, y nada menos, que el acercamiento al mundo de su propio arte. Motivo por el cual Renata Würschmidt posee una producción auténtica, totalmente particular y personal. No se sitúa ni dentro ni fuera de los contextos artísticos de Mendoza, porque ha ido construyendo, casi naturalmente, su propio lugar, desde donde ha logrado crecer artísticamente, y vincularse con los demás agentes de la cultura. Es en el más amplio sentido, una artista independiente.
Por eso también es muy particular la relación con su público, un público que no es casual sino “construido”. Ella sabe perfectamente a quiénes se dirige, a quiénes les “llega” su obra, porque son las personas con las que “dialoga” constantemente: “sé qué les gusta, qué los moviliza, qué idioma hablan, porque es el mismo que hablo yo. Y es por eso que para no traicionar lo que mi público espera de mí, es que, jamás, me traiciono a mí misma”.
Espíritu humilde de proyecciones ambiciosas, metas claras, infinitas inspiraciones y una gran obsesión: el color (anzuelo de toda su producción). “Donde hay un turquesa, seguro habrá un amarillo, naranja o fucsia”. RW posee una intuición claramente desarrollada frente al color, sus obras son la manifestación de la percepción subjetiva del mismo.
Si tuviera que buscar una metáfora, o hacer una analogía que explicara el modo en que esta artista plasma los colores sobre los bastidores, diría que nos imagináramos a nosotros mismos hablando sin parar de aquello que más nos apasiona, con toda la emoción que eso implica. Mientras pinta, habla y ríe casi de forma permanente; pareciera no estar al tanto de lo que su mano hace, y no se trata de la automatización de una técnica, sino de pasión, amor y complicidad en el hacer de su trabajo.
De ahí en más, quien quiera, puede vincular su obra con estilos y estilismos, o encontrar maneras y contenidos conocidos. Pero nadie podría realmente captar el significado de su producción sin conocerla a ella. No es casual que, antes o después de haber adquirido una obra suya, las personas hayan tenido la inquietud y la necesidad de acercarse a Renata.
Obra reciente:
Desde su mundo interior y como una explosión de color, dio a luz un sinfín de obras. Se reconocen, sin discusión, sus “Corazones”. “Noa Neón, tributo a mi infancia”, fue parte su producción 2013. Y este año presentará a “Petit” una obra que va más allá de los límites de su propia producción pictórica, y de los modos tradicionales de realizar una muestra.
“PETIT 2014”: NUEVE MOMENTOS, UNA OBRA
“Petit 2014” es una inspiración en la vida de la última reina consorte de Francia: María Antonieta; desarrollada con la mirada adolescente desde la que magistralmente supo mostrarla la cineasta Sofía Coppola en su “Marie Antoinette” del año 2006.
¿Por qué “nueve momentos, una obra”? porque la obra, que vas más allá de la producción pictórica de la artista, concentra su significado en el transcurrir de nueve momentos vinculados, por un lado, a los momentos más intensos de “Marie Antoinette”; y por otro, a aquellos momentos de la vida en que nos dedicamos, sin darle mucho significado , a comer, vestir, jugar, bailar, comprar: momentos que “pueden ser más que actos simples y cotidianos, pueden ser pequeños fragmentos de grandes historias”.
¿Qué rescatamos de esta obra? Aún sin haberse presentado, esta obra asienta un antecedente más que significativo para la escena del arte de Mendoza, porque es una producción, que por detrás de la idea, de la inspiración de una sola artista, ha desplegado acciones conjuntas de un equipo de trabajo que se desarrolló de un modo espontáneo, solidario, participativo; donde diferentes personas y profesionales, provenientes de diferentes disciplinas, oficios, y sectores, han dado vida a la idea primaria y la han materializado en una obra de arte, que es posible gracias a la formación de esta “comunidad” que trabaja a favor del arte local.
Aquí, en la estructura de la obra, lo pequeño, lo petit, también tiene su correlato: como en el concepto mismo de la obra, lo pequeño no hace referencia a una definición relacionada a dimensiones físicas, a tamaños, sino a aquella definición que entiende por “pequeño” a un “fragmento”, a una “parte”, de algo que lo contiene, y que le permite crecer indefinidamente.
Envuelto en un clima Pop-versallesco, lleno de sorpresas, colores, música, performances, bacanales de comida y bebidas. Renata prepara “Petit 2014”, una obra con nueve momentos que pronto disfrutaremos:
Los nueve momentos de «Petit 2014»:
1- “L´atelier” (Ambientación).
2- “For your consideration” (Performance/Instalación).
3- “Hay mucha gente en Versalles hoy” (Performance).
4- –“Esto es ridículo! –No madame, esto es Versalles (Ambientación).
5- “Qué coman pasteles” (Ambientación).
6- “Santé” (Performance musical).
7- “L´autre chienne” (Muestra pictórica).
8- “Le petit cadeau” (Ambientación).
9- “clap clap” (Ambientación).
Junto a la diseñadora de indumentaria Rigoberta del Tesouro el artista plástico Alfredo Dufour, el grupo literario “EL Atril”; los músicos: Fernanda Aleman, Jose Marcó, VerdeMarte, La Mary; y muchos, muchos, colaboradores más, que estarán a cargo de las ambientaciones, el catering, y demás tareas indispensables, es que podremos disfrutar de “Petit 2014” que promete una muestra que genera expectativas.