Franco Cazzola (1991) es egresado de la Escuela Provincial de Bellas Artes, actualemnte transita las carreras universitarias de Licenciatura y Profesorado en Artes Visuales de la UNCuyo, y constantemente participa de programas y clínicas de arte contemporáneo.
En paralelo a su formación este joven artista le da forma a una producción artística de estilo propio; que tiene como eje indagar y reflexionar sobre las relaciones humanas, focalizándose principalmente en las diferentes miradas que pueden ensayarse sobre el amor, la familia, la fe, la pareja y los amigos, nos comenta Franco. “Es una obra que se codea con lo cursi” nos dice, y nos ofrece obras plagadas de signos que disparan en el espectador reflexiones acerca de las cosas más indispensables de la vida.
Aquello que conforma nuestro entorno cotidiano y que vemos cada día, a cada momento, él lo vuelve obra de arte, y al hacerlo, pone al espectador a observar detenidamente lo que en el transcurso de su vida a veces pasa sin demasiada importancia.
Las flores como metáfora de lo efímero, de lo que perece y que por tanto hay que disfrutar mientras dura, como un abrazo entre dos seres queridos.
La piedra fundamental: el hogar, nuestro refugio, donde podemos ser nosotros mismos todo el tiempo; el espacio que en algún momento decidimos compartir, para construir.
La naturaleza, que convive con lo que construímos, nos da muestras de los cambios, de la necesidad de renovarse para proyectar, para crecer y así ser parte del ciclo de la vida.
Dueña de una ambigüedad que hace dialogar lo simple y lo compleja, la obra de Franco nos habla dirigiéndose directo a nuestro corazón. Visitá la próxima edición de “La Imagen Accesible” y dejate enamorar con parte de esta producción artística.