«El año pasado, nuestro grupo de amigos llamado Frisbee cumplió un año y por eso decidimos festejar con una fiesta, ahí empezó todo. Nos denominamos así porque nos reunimos a jugar al frisbee. Bajo esa consigna cada uno fue invitando a alguien que conocía, así se fueron juntando varios grupos, hoy somos 30 chicos. Una fiesta nos pareció una buena forma de celebrar lo que habíamos logrado. De ahí en adelante hicimos una por mes y la gente se copo», cuenta Gervasio Guiñazú uno de ellos.
Lo que las diferencia de otras fiestas son varios factores. Principalmente la energía que se genera al ser un grupo de amigos tan grande; a lo que agrega Gervasio «en las primeras fiestas, sacábamos instrumentos onda panderetas y ese tipos de cosas y tocabamos sobre las canciones. Y si vos ibas a un asado nuestro hacíamos lo mismo. Eso contagia mucho y la gente se re prende». Otro factor importante es que las fiestas van variando de lugar, son fiestas nómades. La música también es un diferencial, que se escucha no es la misma que la que se escucha en un boliche convencional. Hay cumbia colombiana, rock, electrónica no tradicional, música de los 80, y más. Y por último es que el costo de las entradas no es alto, «intentamos de que el costo de entrada sea lo más barato posible» comenta uno de los chicos.
La movida convoca a personas de todas las edades – mayores de 21 años -, la idea principal es divertirse.
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