Los números musicales son el punto más fuerte de este film que narra el ascenso, la caída y el renacer de Robbie Williams. Una mirada cruda (y luminosa) sobre el precio de la fama, dirigida por el creador de The Greatest Showman.
El film dramático dirigido por Robert Zemeckis está narrado desde un único punto de vista, con cámara fija, logrando capturar la nostalgia que habita en los espacios.
Devolviendo el pulso a un género que parecía agotado, esta producción combina ritmo, tensión y un formato preciso para sumergirnos en el caos de una sala de emergencias.