Hace unos diez años se vivió el auge de los restaurantes pop-up. Esta moda que llevaba a reconocidos chefs y a sus comensales a tener encuentros fugaces y casi clandestinos creció con fuerza y se expandió en Estados Unidos, en Europa y, algo más tarde y a menor escala en la Argentina.
El francés Ludo Lefevre fue uno de los principales referentes de la movida de los restaurantes pop-up, que durante algunos días funcionaban en terrazas, casas abandonadas, hoteles en construcción y luego desaparecían, hasta encontrar un nuevo espacio donde no sólo se comía bien, sino que se vivía toda una experiencia social.
Había que ser rápido para subirse al tren de los restaurantes pop-up. Porque te distraías un momento y ya se habían ido.
Como con la indumentaria, esta curiosa moda tuvo sus cinco minutos -o años- de fama y, hace rato ya que los cocineros pasaron a otra cosa. Hoy lo cool para los chefs del Viejo Mundo parece ser la gastronomía de otras latitudes, especialmente de Latinoamérica.
La gira de los Roca por México, Colombia y Perú
Fundado en 1986 en Gerona (España) y especializado en cocina tradicional catalana, El Celler de Can Roca es actualmente el segundo mejor restaurante del mundo para la revista Restaurant Magazine. Dirigido por los tres hermanos Roca, recibió premios y reconocimientos ininterrumpidamente desde el año 2000.
Josep, Joan y Jordi se preparan ahora para su gira “Alta Cocina con Valores”. Será la primera vez que los Roca cierran su cocina para presentar en otros países su aventura culinaria.
Este tour incluye México, Colombia y Perú. Comenzará en agosto en Monterrey y México DF, luego seguirá por Medellín (Colombia), para cerrar en Lima, desde el 1 de setiembre.
«Esto es nuevo. Es un tributo a la despensa latinoamericana. No queremos abrir delegaciones, queremos ser nosotros los que vengamos y podamos reconstruir El Celler de Can Roca en otra capital. ¿Cómo sería El Celler si estuviera en Lima, por ejemplo? La idea para nosotros sale de la motivación creativa, búsqueda de inspiración, de hacer tributo y ser proactivo al talento de cada uno de los lugares que visitamos», recalca Josep.
La experiencia del “Alta Cocina con Valores” no se limitará a la mesa que servirán. Los hermanos Roca están preparando un documental para mostrar este acercamiento a otras culturas gastronómicas. También piensan publicar un libro con las recetas que preparen.
Los Adrià llevan México a Barcelona
El cocinero catalán todavía es considerado por muchos como el mejor chef del mundo. La revista norteamericana Time lo incluyó en la lista de los 10 personajes más innovadores del planeta en el año 2004. Adrià fue chef y copropietario hasta 2011 del desaparecido restaurante español El Bulli (Gerona) que recibió a lo largo de su historia las máximas distinciones gastronómicas.
Durante un viaje a México en 2012, Ferran dio a conocer su interés y admiración por esa cocina y anunció que uno de sus proyectos era abrir con su hermano Albert un restaurante de cocina mexicana en Barcelona.
Ferran explicó que la idea fue originalmente de su hermano Albert y que sacó provecho de ese viaje a México para intentar nuevas cosas y desarrollar opciones para el restaurante.
“Somos unos enamorados de México y de su cocina, hemos estado muchas veces y creemos que tiene un mercado muy interesante en España, es un concepto que tendrá como principio el máximo respeto por la calidad del producto y las recetas mexicanas, pero eso sí, dándole nuestro toque personal”, explicó Albert.
Para la arquitectura y decoración, Albert quiere mostrar algo diferente al común de los lugares de cocina mexicana que se abren en el extranjero: “Barcelona es una ciudad que vende Mediterráneo y sol. Quiero buscar ese sol mexicano en forma de los halls que recuerdo de los hoteles pequeñitos que hay en la playa de Tulum, color azul Caribe, muebles de madera, ventiladores, ventanales y marquesinas, etcétera, todas esas imágenes son las que nos inspiran”.
Uno de los retos principales para el restaurante radica en los productos: “El mismo no sabe igual en México que en España, pero no hay cocina sin producto y lo más importante es crear una red de importación y seleccionar los productos que ya se venden en España”, asegura Ferran.
Apasionados de la cocina mexicana, los Adrià quieren apostar por el concepto cantina, por las elaboraciones frente al comensal -con un menor contenido de especias para adaptarse al paladar local- y por la coctelería. Guacamole, quesadillas y tacos formarán parte de la oferta, siempre pasada por el tamiz creativo de los hermanos.
Tanto Albert como Ferrán tienen varias experiencias gustativas y personales en México y con su gastronomía: “Es espectacular ver cómo los mexicanos disfrutan en la mesa y cómo se emocionan cuando hablan de ésta o aquella receta que prepara un familiar”.
El restaurante mexicano recibirá el nombre de Hoja Santa y estará ubicado en el barrio de Sant Antoni. Esperan que pueda estar listo para su apertura antes de este verano (europeo).
René Redzepi abrirá un Noma “a la japonesa” en Tokio
El laureado chef danés René Redzepi trasladará su restaurante Noma -recientemente elegido por cuarta vez como Mejor del Mundo, por la revista Restaurant- de Copenhague al Hotel Mandarin Oriental de Tokio. Lo hará entre el 9 y el 31 de enero de 2015, lapso durante el cual el establecimiento deleitará a 100 comensales por día, con una porción de historia culinaria y una degustación de la filosofía del Noma, interpretada por primera vez en clave japonesa, y con ingredientes locales y de temporada.
Redzepi comenzó a planear esta «recolocación temporal» tras una visita que realizó a Japón hace cinco años, invitado por el chef Murata, del prestigioso restaurante Kikunoi. El chef danés quedó «asombrado por la riqueza de la cultura gastronómica japonesa» y espera que el conocimiento adquirido durante su estancia en Tokio enriquezca su restaurante y su cocina cuando regrese de nuevo a Copenhague.
“Ya hemos comenzado a conocer la riqueza de la comida y la cultura japonesa con el equipo de Mandarin Oriental, ya que nos han llevado al mercado de pescados de Tsukiji y a los mercados de vegetales en Tokio, y nos han presentado a algunos proveedores especiales en los últimos meses”, asegura René.
Redzepi también se declara fan de las diferentes culturas que componen Latinoamérica. Ha viajado en numerosas oportunidades a países como México, Chile, Perú y Argentina. Por lo que no nos extrañaría que en un futuro próximo se embarque en alguna loca experiencia que incluya a los sabores del Nuevo Mundo.
Desde la cálida y familiar España -al menos para los argentinos- hasta la fría y lejana Dinamarca. Redzepi, los Roca y los Adrià. Son la camada de los europeos que en vez de “dormirse en los laureles”, salieron de gira. Por propia curiosidad o porque fueron invitados decenas de veces a colaborar con colegas, a dar charlas, asesorar o participar de diferentes eventos en torno a la gastronomía. Fueron con toda su sabiduría, talento y experiencia, y volvieron cambiados: enamorados de otros sabores, de otras maneras, de otras culturas.
